Nuestros

Orígenes

Nacimos hace más de 20 años siendo solo un servicio a domicilio. Nuestro país se encontraba bajo una época de inflación. Había muchos cambios que obligaron a cerrar empresas, todo se volvió más costoso, muchos perdieron sus trabajos.

Nuestra familia se unió desde el más pequeño hasta el más grande, todos con amor y entusiasmo seguíamos trabajando en hacer crecer este nuevo negocio familiar luego de las jornadas laborales y de estudios. Cada uno ponía su granito de arena para poder superar la crisis. Cada comida, cada asado, cada corte de carne se cocinaba con el corazón y se entregaba a domicilio. Así fue como cada vez más personas llegaban a nosotros pidiendo nuestros platos.

Nuestro primer puesto físico era sencillo, pero la emoción que se vivía era única. Esas memorias están en partidos que, con tanto anhelo, esperaba cada quiteño para ir a ver a jugar a su equipo favorito. En el Estadio, se vivía una conmoción de emociones que nos permitía compartir lo mejor de nosotros. Mientras que todos tenían algo usual en sus carritos, nosotros vendíamos algo nunca visto, algo especial, creado a partir de la pasión de Don Fernando Rojas: nuestros famosos choripanes y picaña. A las personas les encantaba y cada vez sumábamos más clientes.

Esta tradición nos dio la oportunidad de brindar un mejor servicio. Creamos nuestro primer local en la Av. Shyris, era pequeño, pero no faltaba la diversión. Decidimos juntar dos pasiones de nuestros clientes: el deporte y buena la comida. Desde ese entonces y hasta ahora, nuestros locales siempre han sido un lugar para compartir con nuestros seres queridos y poder disfrutar de un buen partido de fútbol. Es lo que más nos caracteriza, un ambiente divertido, confortable, con excelente atención, que te hace sentir en casa, y con los mejores cortes de carne de la ciudad.